El desarrollo urbano, industrial, turístico, agrícola, ganadero y acuícola, compiten por el suelo de los humedales; aunado a la contaminación: desechos sólidos urbanos, contaminantes industriales, pesticidas, fertilizantes agrícolas, derrames de petróleo, etc., así como modificaciones a los flujos naturales del agua; producen en conjunto, efectos negativos en el desarrollo de las plantas y animales que habitan los humedales, (Manglares de México, CONABIO, 2008). Esta problemática compleja encontró en la conservación ex –situ, una alternativa que permite tener un humedal en casa; entendiendo como conservación ex – situ, la conservación de las plantas y animales fuera de sus lugares de origen (CDB, Brasil, 1992); se desarrolla en jardines botánicos, zoológicos y acuarios, como una alternativa que apoya los programas de conservación.
Lográndose en Ciudad Industrial Bruno Pagliai de Veracruz, Veracruz, mediante la Conservación ex situ: Humedales, donde pueden vivir sin peligro, el sapo gigante Bufo Marinus, reptil teterete Basiliscus vittatus y libélulas, lo cual es un indicador del equilibrio que conservan dichos estanques. Incluso se desarrollan los mangles: Rhizophora mangle, Avicennia germinans y Laguncularia racemosa, en agua dulce. Teniendo como control biologico de larvas, diversos peces que toleran bajas concentraciones de oxigeno. De esta forma se logro transmitir a personas adultas, principalmente niños la importancia de conservar y conocer los humedales y como estos son el hogar de diversas plantas y dan alimento, refugio, zonas de reproducción y desove a diversos animales.
Literatura citada
Convenio sobre Diversidad Biológica (CDB); Cumbre De la Tierra, Conferencia De las Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo, Río de Janeiro, Brasil, 1992.
Manglares de México, Comisión Nacional para el conocimiento y uso de la Biodiversidad, CONABIO, México, 2008, 38 pp.
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